8590.- Destinado y obstinado al óbice inverso en el anticipo de la oquedad de la soledad, el oprobio de la realidad cada día no es variedad.
8591.- Lo fútil del embrollo de los galardones de lauros establecidos, engalanan la soberbia del juicio de distinciones que abrigan imposturas de ímpetus estériles y eventuales.
8592.- Paliar la soledad es retardar la responsabilidad de retirarse de la periferia de las relaciones humanas con ganas de asirse a una costumbre que concilia con sigo mismo al taciturno ser.