9901.- La ignominia si es por consigna es un deshonor personal que no es de aceptar, tales vejaciones que ultrajan los sentidos cuando los espacios del tiempo en la historia magnifican sus sañas en las hazañas de magnificar e imponer su verdad en consecuencias de odio y terror que generan miedo y horror.
9902.- Los fueros que fueron, obedecen a los signos de componendas de recursos necesarios que se manejan con una ligereza sin aspereza en la desvergüenza de operar impune ante el agravio del más necesitado que solventa sin saberlo (¿?), en el lado oscuro de las trapacerías administrativas de chivos expiatorios de la burocracia.
9903.- La pos-verdad, después de que ésta fue supuesta con algún dicho o más bien dejo de mentira que es repetida, tal vez con cierto cinismo o cándido decir por imitar a quien solo sabe mentir en beneficio de alguien que supera su malestar en la honradez por la dejadez de quienes asisten a repetir lo que jamás se a de concebir.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario