11, 266.- Leer para saber implica comprender y en ocasiones lo que algunos llaman desaprender o dar lectura a los propios manuscritos que dependen en general de aceptar interceder ante lectores de diversos intereses en el nuevo orden global terrenal que avecina por la recomposición entre países del abigarrado tráfago de problemas a resolver de incoherentes desastres.

11, 267.- La obligación suele ser una prisión que no referente a la soledad apartada de lo externo cuando es aceptada, necesitada y deseada al aplicar el no al vaso vacío ni al medio lleno y menos al que reboza su contorno en derrame innecesario en la bastedad que tampoco resulta conceder la completitud del derroche.

11, 268.- Conforme a la periferia y su relación con el interno humano en solidaridad y compromiso en la identidad es perenne en cuanto a lo endeble y frágil de la limitada existencia en la posibilidad de la polaridad de la conciencia que sólo resulta manipulable a la interioridad de los efectos de la otredad.