LA OTREDAD, ESE ESCAPARSE DE SÍ MISMO, NECESARIAMENTE ESTÁ EN LA SOLEDAD DE UN DESEO DE INTERIORIDAD HASTA DE LA PROPIA HUMANIDAD.

12, 223.- Los acontecimientos aún en los tiempos de la pandemia suelen ser al ritmo que le precedió y que aterra la rapidez, aceleración, y lo efímero que las inercias de la modernidad logran con su velocidad en esa oposición a la que el Filósofo Jaques Derrida especulaba con el Ser y el Tiempo, que percute en los resultados aleatorios del error aleatorio, tal vez de querer relizar más que los demás.

12, 224.- Heliocéntrico es ser convincente entorno al los ejes de la duda en ese pedregal de la existencia de ignorancia supina en que la pedestre existencia asola con sus peculiares interrogantes y que no se tienen las estructuras suficientes para manifestar la experiencia que resuelva el uso y costumbre del desenvolverse en el tiempo para actuar en lo conducente. 

12, 225.- Ante el espasmo de ciertas vivencias del entorno que causan contracción de esa opción de la muerte en la posibilidad de esa realidad que se manifiesta como enfermedad, lo que menos deseamos es que nos afecte en ese podría que se asemeja a la lamentable hubiera y al que no se quisiera y todo ello es que estamos en el contexto y que no se desea ser partícipe de él.