12, 307.- La libertad que logran los libros en soledad escrituran su uso a manera significativa en la de entender con más precisión la palabra hablada que es tan espontánea que refleja los instintos añejados de usos y costumbres de adicción a la repetición en la que la novedad de otra opinión amplía la duda con elementos que cruzan los pensamientos de inéditos creativos e ideas de representaciones que ven más allá.
12, 308.- El gozo es un reboso que derrama placer en los sentidos de manera que implica el cruce y el disfrute de esa soledad que afronta en mucho toda temeridad que asola a la humana realidad en la que la compañía no entretiene y disloca la aprensión de los esteros que se libran anegados de baladíes formas de interesar sólo lo que hay de su cotidiana señal de cotidianidad en esa acelerada estima.
12, 309.- Cuando algunos días parecen siglos por su pesada duración y otros se van como el agua entre las manos, el aburrimiento y la tristeza enerva esa pereza de la existencia en ese caos de la vivencia y los opuestos en la medida del reloj de arena al igual que la clepsidra que las damas del antiguo utilizaban en el disfrute del tiempo de un flujo de agua regulado en compañía de damas de pago.
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