12, 427.- La casualidad como caso fortuito, en contingencia y eventualidad en la que se puede averiguar su causa como la que ahora padecemos a nivel global terrenal, difiere con ocasionar y explicar la razón que tenemos para hacer, realizar, decir o pensar su principio, fundamento y/o consecuencia.
12, 428.- Esa descomposición de corruptelas antecedente de cierta maldad, como el soborno y el cohecho que resultan de malas costumbres de uso usanza y práctica que se arraigan a lo cotidiano para resolver en forma rápida asuntos de mordaz solución que con dinero se resuelve en beneficio de un intermediario que facilita el robo en beneficio de pocos y daño de muchos.
12, 429.- Los sentimientos del deseo son puente que se unen a otros matices psíquicos en la que preceden aspirar y querer que sugieren una voluntad activa en el que intermedian el anhelar de manera más o menos intensiva en el ansiar y que suponen necesariamente actividad por parte del sujeto que lo apetece o de necesidad como uno de los sentimientos humanos.
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