11, 146.- Liberar sentimientos muy internos en el contexto del entorno externo en ese intercambio tan necesario para valorar y remover los excesos negativos en experiencias positivas en busca de plenitud y armonía que congenie con los demás es sincerar firmeza y confianza de la estabilidad emocional del hondo fondo y fogoso que husmea el delgado interés de otros.

11, 147.- Toda plétora plena de excesos extremos amenaza doblar con pliegues de resentimientos o remordimientos de quien se ostenta presuntuoso de estrechez mental, pues ofende lo más elemental de la estofa que habrá que esquivar y desviar por convenir eludir engorro o disputa por referencia ancestral que no caduca.

11, 148.- Dentro del caos se determina el orden, así como la luz genera sombras y vierte la conexión con lo material que se manifiesta y remplaza la artificialidad de la aparente realidad que en ocasiones estremece esa certeza manifiesta de que el silencio es apto para el estruendo seguido de su eco y el sabor en el paladar o en el olfato al aspirar y la piel su palpar.