11, 167.- La sociedad de los amagos con la inseguridad en sus halagos pretende tener un líder que colme sus esperanzas de resolver las apariencias del parecer hacer apoyando el hábito del dar sin merecer por carecer de la enseñanza que da el aprender y emprender aceptar lo que doblega al realizar para entender.

11, 168.- Los apegos a conductas egoístas suelen ser vistos con recelos de quien no tiene la conducta o la seguridad que le da la confianza a la duda o sospecha y poca seguridad en su andar por el camino al orientarse en su destino de lo que se quiere alcanzar pues parece que su sino entiende a donde se pretende llegar.

11, 169.- El oprobio por el saber, el recuerdo y el espacio tiempo por vivir producen víctimas del estrés, ese abanico de apuros que por hacer más con menos de apremio y urgencia se aprehende aprisa en la anuencia y audiencia por aceptarse y aposenta aprisionar los sentidos consentidos del ser y su existencia.